LA CANTIDAD DE LÍNEAS FIJAS ha mostrado un lento crecimiento. De 2006 a 2007 apenas se sumaron unos 19 mil abonados a este servicio, mostrando un comportamiento totalmente opuesto a lo que sucede en el mercado de los celulares.
M udarse de casa o cambiar de compañía de servicios ya no implicará perder su número telefónico. Si las reformas que estructura la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (Siget) marchan viento en popa, en febrero del próximo año, a más tardar, la portabilidad numérica será una realidad.
La autónoma ya tiene listo el estudio de la factibilidad técnica y económica de mudar al país a un sistema de numeración portable, en el cual tanto los usuarios de telefonía fija como de celulares se convertirán en los dueños de su número telefónico y podrán conservarlo para siempre, independientemente de si se cambian de compañía telefónica.
El titular de la Siget, Fernando Argüello, explica que el análisis arrojó que el proyecto es viable técnica y económicamente.
Los costos económicos, que correrán por cuenta de las operadoras telefónicas, alcanzarán los 15 millones de dólares. Las compañías tendrán el estudio de factibilidad en sus manos a más tardar este jueves.
La inversión de los 15 millones de dólares se divide en tres rubros: cuatro millones de dólares serán utilizados por la empresa que administrará la base que centralizará la numeración telefónica, seis millones corresponden a las adecuaciones para la movilidad de líneas fijas y los cinco millones de dólares restantes serán para el área de celulares.
El método que considera viable la Siget es el que se conoce como "All call query", que consiste en localizar el número marcado en una base central de datos para que luego se conecte directamente a la red.
Para este sistema se requiere contratar una firma independiente que administre la base central. "Se tiene que determinar cuál sería la empresa que debe prestar ese servicio, aquí (en el país) no hay quien lo haga. Tiene que ser alguien independiente, que no sea el regulador ni los operadores", enfatizó.
Pero al final, aclara el funcionario, serán las operadoras quienes determinarán el método que más les convenga. "A nosotros como regulador nos interesa que la portabilidad se haga efectiva, ¿cómo se va a hacer?, pues no tenemos inconvenientes que se haga de una u otra manera", puntualizó.
Argüello asegura que ha visto mayor receptividad de las operadoras telefónicas en adoptar este método.
La movilidad numérica obligará a las empresas a esmerarse en prestar un mejor servicio con tal de no perder los clientes.
"Lo que queremos es otro tipo de competencia, por el mismo efecto de no perder el cliente tienen que mejorar los servicios que están prestando, sus costos y su calidad", advirtió el jefe de la reguladora estatal.
Además, los usuarios no estarán atados a una compañía sólo por conservar su mismo número telefónico.
La Siget estima que si las operadoras establecen algún tipo de costo por autorizar el cambio de compañía éste no debería ser alto.
MÁS CAMBIOS En CAMINOLas telefónicas también serán obligadas por ley a bloquear definitivamente los celulares que tienen reporte de robo.
De acuerdo con las estadísticas de la Policía Nacional Civil, el año pasado se registraron más de 116,000 aparatos robados.
La Siget sostiene que dos empresas ya invirtieron en la compra de un software que les permitirá desactivar celulares en el mismo momento que reciben la notificación de robo por parte de los clientes.
Actualmente ese proceso demora unas 24 horas, pero tiene la deficiencia de que sólo inactiva el chip del teléfono, pero el aparato-que es lo más costoso- puede utilizarse nuevamente.
Con las reformas a la Ley de Telecomunicaciones, que son analizadas en la Asamblea Legislativa, el teléfono quedaría bloqueado definitivamente.
Según Argüello, las firmas Telecom y Telemóvil ya compraron el equipo que les permitirá realizar ese tipo de bloqueo, mientras que Digicel ha dicho que lo tiene contemplado en su presupuesto. El software, conocido como sistema EIR, tiene un valor aproximado de medio millón de dólares.
Además, la información de los aparatos robados estará disponible en una base de datos regional, la cual será administrada por la Comisión de Telecomunicaciones de Centroamérica (Comtelca).
"Estaríamos esperando que en seis meses esté implementada esta base de datos. Cada regulador informaría a Comtelca de los celulares robados y esta se encargará de darle el acceso a la información a los operadores (de toda la región)", aseguró el funcionario.
La estrategia para reducir el robo de teléfonos también incluye un mayor control sobre los distribuidores.
El objetivo es que la compañía no pierda de vista el chip en ningún momento, desde que entrega los paquetes al distribuidor más grande hasta su venta final, de manera que se pueda identificar las zonas donde se dan el mayor número de robos.
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